Los Heléboros, de floración invernal temprana, este año han retrasado un poco la llegada de sus flores, y las llamadas Rosas de Navidad han decidido abrirse ya en el nuevo año.
Es lo que tiene la naturaleza!
La jóven Hardenbergia, ha completado su floración que puede prolongarse hasta la entrada de la primavera.
Esta pequeña Camelia cuyo cultivar desconozco fué un regalo de cumpleaños de mi madre y tiene unas flores delicadas y de lo más peculiares ya que sus hojas parecen de tela.
El Teucrium, o Teucrio no ha parado de florecer en todo el año!
Las flores moradas de la Tibouchina, llevan alternándose desde el mes de septiembre!
Este Viburno de plena floración invernal, va algo retrasado sus flores rosadas, que se vuelven blancas cuando llegan a completarse.
....y los Eléboros, con sus globulosas flores colgantes, me cautivaron desde mis primeras salidas al monte. No hay muchas floraciones verdes. Crecen libres en muchos bosques de Asturias.
Han ido resembrándose y floreciendo desde el verano, y han dado color a la huerta todo el invierno.
La Coleonema, agota ahora su floración algo deteriorada ya. Desde septiembre a alternado sus pequeñas florecillas rosas sin parar.
Todo ello, teniendo en cuenta que este invierno de temperaturas elevadas confunde por completo a las plantas, haciendo que muchas adelanten su floración y se desgasten más en su esfuerzo por perpetuarse.
