La Casa de Eyrignac lleva más de cinco siglos en la misma familia. A lo largo de los años los jardines han ido cambiando y evolucionando con las diferentes modas del momento. En el siglo XVIII, fueron jardines a la Francesa, con el XIX llegó desde Inglaterra el romanticismo que dió libertad a todas aquellas formas tan ajustadas y medidas y sembró en Eyrignac palmeras..bambues..inmensas rosaledas...Después y durante mucho tiempo a comienzos del siglo XX los jardines cayeron en el abandono . Fué en los años sesenta, cuando G. Sermadiras llevó a cabo la empresa de levantar los Jardines que nacieron según sus palabras....tanto de mi corazón como de mi espíritu.>>
Son Jardines de verdor, conformados de diferentes tonos obtenidos mediante topiarias con Tejo, Taxus baccata, para los tonos oscuros y Carpes, Carpinus y Boj Buxus sempervirens, para los tonos más claros.
Aunque los jardines son de un estilo "inclasificable", posee rincones con estilo bien definido, como los parterres a la francesa de delante de la vivienda o una pérgola de rosas rodeada de un suelo de Vincas blancas y una pequeña estatua, vestigios de la época romántica.
En otro rincón, una pequeña pagoda china, recuerdo también de otras épocas y otras modas.
Son unos preciosos Jardines verdes, donde no se echa de menos los colores porque todo t lo aportan las formas y la organización de toda la vegetación, que es perfecta para hacer del paseo un momento inolvidable. Sólo algún árbol casi centenario crece libre de formas haciendo resaltar más aún el orden del jardín.
Ahora es el hijo de Gilles Sermadiras, Patrick quien heredó la pasión de su padre y está a cargo de los Jardines, que es uno de los más visitados del Périgord.
