El viento también se ocupó de tirar los higos pero en este caso me hizo un favor porque así pude ponerme manos a la obra en seguida y dedicarme la tarde de ayer a hacer conservas. Además estaba lloviendo y tenía el día libre. Me encanta cocinar sin prisas y mientras llueve...... debe ser porque si no con buen tiempo, corro patas que te quiero para afuera.