Colocamos en la huerta un "Hotel de mariquitas",
un pequeño habitáculo con agujeros de entrada
y una maraña de estropajo en su interior
con la esperanza de que en algún momento
lo ocupen, bien para poner sus huevos
o por qué no para hibernar.
Es un lujo tener a esas carnívoras voladoras
por la huerta o el jardín devorando pulgones
y demás bichejos indeseables..
Además de con pequeñas plagas, podemos
atraerlas con flores de colores llamativos
y en forma de paraguas, tipo Caléndulas..
Este año vi muy pocas en nuestro jardín...
pero yo no pierdo la esperanza!!